Nuevamente la píldora del día siguiente está en el ojo de la tormenta, la discusión se da entre fanáticos poco consecuentes, por un lado la iglesia católica, venida a menos gracias a los comentarios desubicados de sus autoridades, luchando por que el gobierno a través del ministerio de salud, prohíba el uso de, según ellos, la píldora abortiva. Por el otro lado, tenemos al poder judicial, quién ha ordenado la provisión puntual de estas píldoras como método de control de natalidad al que las mujeres tienen derecho, ojo que nadie habla del hombre en este tema. Más allá tenemos a grupos, que si bien no son católicos, se autodenominan, Pro-vida y están en contra, también, de la implementación de la píldora. Más allá, al rincón, pero no por eso un grupo pequeño, se encuentran los pro-derechos, un grupo que dice que las mujeres y demás tienen derecho a decidir, y en este caso, decidir si estar o no embarazadas, biologicamente hablando, derecho de evitar la fecundación, derecho de eliminar el...
Soy investigador en salud global, me formé como tecnólogo médico y me entrené en enfermedades infecciosas y tropicales. Disfruto de mi familia, gusto de viajar y conocer gente, tengo mi martes casual y mi jueves de patas, soy fanático de mi trabajo y me divierte enseñar. También, soy adicto al café en todas sus versiones y suelo, de vez en cuando, ponerme a escribir.