Nuevamente la píldora del día siguiente está en el ojo de la tormenta, la discusión se da entre fanáticos poco consecuentes, por un lado la iglesia católica, venida a menos gracias a los comentarios desubicados de sus autoridades, luchando por que el gobierno a través del ministerio de salud, prohíba el uso de, según ellos, la píldora abortiva. Por el otro lado, tenemos al poder judicial, quién ha ordenado la provisión puntual de estas píldoras como método de control de natalidad al que las mujeres tienen derecho, ojo que nadie habla del hombre en este tema. Más allá tenemos a grupos, que si bien no son católicos, se autodenominan, Pro-vida y están en contra, también, de la implementación de la píldora. Más allá, al rincón, pero no por eso un grupo pequeño, se encuentran los pro-derechos, un grupo que dice que las mujeres y demás tienen derecho a decidir, y en este caso, decidir si estar o no embarazadas, biologicamente hablando, derecho de evitar la fecundación, derecho de eliminar el óvulo fecundado o derecho a evitar la implantación del huevo; porque esto es lo que produce la píldora. He aquí la cuestión ya más ética y hasta filosófica, el huevo tiene vida?, si vemos que este es la unión de dos células, por supuesto que tiene vida, puesto que ambas células tienen vida antes de unirse.
Pero imaginemos un escenario en él que la píldora no existe, que pasaría al día siguiente, cada día después si una mujer, o una pareja se embaraza sin quererlo, bueno se viene el embarazo, el parto, la crianza de uno, si no salen mas niños y todas las amanecidas, alegrías y problemas que los niños traen consigo, además del gasto por supuesto; esto si el niño crece en un ambiente feliz. Pero quienes son los usuarios de métodos como este, para no ser padres, por supuesto es de uso en personas que, léanlo bien, no quieren, no desean, no pueden, no aceptan ser padres, entonces obviamente no les vamos a permitir ser padres a quienes no quieren.
Seguro los mas católicos dirán, si no quieren hijos que no tengan sexo, imposible verdad. Es como vivir sin comer; el sexo es parte de nuestra responsabilidad biológica con nuestros cuerpos, se tiene y punto. La píldora del día siguiente no facilitará el incremento de relaciones sexuales, ni siquiera la gran cantidad de hostales por todas partes lo facilita, las personas tienen sexo hayan pastillas o no, hayan barreras o no, es conducta humana pura. por supuesto, tampoco es que la gente deba usar la píldora a libre albedrío, es sabido que mientras más la uses menos funciona, hay varios estudios al respecto.
El tema de la píldora, no debería ser un tema de religión, debería ser un tema de responsabilidad, y una responsabilidad desde diferentes frentes, usuarios, gobierno y demás involucrados, no sólo en el control de la natalidad, si no también del lado de la gente que se educa en sexualidad.
A mi me gustaría tener la píldora en casa, a disposición, así me evitaría preocupaciones por embarazos no deseados.